Tipos de puertas correderas

Tipos de puertas correderas

Las puertas correderas de vidrio o puertas corredizas de cristal son la mejor opción para ganar espacio y dar amplitud a los espacios. Por eso no es de extrañar que la demanda de este tipo de puertas de vidrio sea cada vez mayor. Son perfectas para separar la cocina del salón, para aislar el salón o para separar oficinas de zonas comunes. Aunque dada la gran cantidad de tipos de puertas correderas que existen, también es cada vez más habitual encontrarlas en todo tipo de habitaciones, incluidos baños y dormitorios. Ya que también son ideales cuando el espacio es reducido, por permitir ahorrar el espacio de apertura de las puertas convencionales.

Puertas correderas con guías exteriores

En Devitro Europa somos especialistas en puertas correderas, por lo que en nuestra fábrica nos adaptamos a las necesidades de nuestros clientes para crear las puertas correderas a medida que necesiten. Uno de los tipos de puertas correderas más habituales son las que cuentan con guías exteriores, ya que no requieren obras, por lo que su instalación es más cómoda y sencilla.

En estos tipos de puertas correderas, la apertura se realiza a lo largo de la pared a través de guías y rieles que quedan totalmente a la vista. Por lo que otra ventaja que tienen este tipo de puertas es que las guías exteriores pueden servir como elemento decorativo por sí mismo, especialmente si se escogen puertas de vidrio o de madera decorativa, con guías de metal.

La desventaja de las puertas correderas con guías exteriores es que no permiten aprovechar tanto el espacio, pues la pared por donde se desliza no queda liberada.

Puertas corredizas ocultas o empotradas

A diferencia de las puertas correderas con guías exteriores, las puertas correderas empotradas se deslizan a través de unas guías que quedan escondidas dentro de la pared mediante un sistema especial de casetones.

La desventaja respecto a las anteriores es que para su instalación es necesario hacer una pequeña reforma para poder ocultar las guías. Sin embargo, las puertas correderas empotradas al tabique tienen la gran ventaja de poder aprovechar al máximo las paredes bajo las que quedan ocultas las hojas de la puerta. En estas podrán colocarse muebles o colgar objetos decorativos.

Puertas corredera de una hoja

En viviendas, las puertas correderas de una hoja son un gran reclamo, ya que son el modelo que mejor sustituye a las puertas abatibles convencionales, por ocupar el mismo espacio que éstas.

En este caso, nos encontramos con una única hoja con movimiento horizontal que puede ser en ambos sentidos.

Puertas correderas enfrentadas

Las puertas correderas enfrentadas son las típicas puertas correderas dobles que encontramos en estancias más amplias como salones u oficinas. Son el modelo más solicitado para proporcionar aperturas de gran tamaño y comunicar espacios como el salón y la cocina.

En estas instalaciones, las puertas están alineadas en la misma dirección y se abren hacia cada lado de la pared donde se instalan. Además, pueden instalarse tanto dentro como fuera del tabique. Elegir entre un tipo u otro dependerá de las características de la pared, de las necesidades de cada cliente y de su presupuesto.

Tipos de puertas correderas plegables y apilables

Las puertas correderas plegables utilizan un sistema de apertura que permite a los usuarios plegar las hojas de vidrio sobre sí mismas para separar los espacios o abrirlos por completo.

Las puertas apilables utilizan un sistema muy parecido a las puertas plegables. Pero en este caso funcionan como una persiana en la que las hojas se conducen por una guía. Se trata de una opción más socorrida para zonas exteriores.