vidrio bajo emisivo

Vidrio bajo emisivo: qué es y cómo mejora el aislamiento térmico de tu vivienda

La elección del acristalamiento influye directamente en el confort de tu hogar y en la factura de la luz. En este sentido, el vidrio bajo emisivo (conocido también como vidrio low-E) es una solución técnica y estética que reduce las pérdidas de calor en invierno y la entrada de calor en verano. 

Si quieres saber más, no te pierdas este artículo. Te explicamos qué es el vidrio bajo emisivo, cómo funciona, en qué casos conviene y qué beneficios aporta al aislamiento térmico de tu vivienda.

¿Qué es el vidrio bajo emisivo?

El vidrio bajo emisivo es un vidrio recubierto con una capa muy fina, y prácticamente invisible, de óxidos metálicos que modifican su comportamiento frente a la radiación térmica. Esa capa actúa como un espejo selectivo que deja pasar la mayor parte de la luz visible pero refleja la radiación infrarroja (calor). El resultado es una reducción de la emissivity’ y una mejora de la transmitancia térmica global del acristalamiento.

Cómo funciona y por qué mejora el aislamiento

El vidrio transmite tres tipos de energía: calor por conducción/convección, radiación y luz. El recubrimiento low-E actúa sobre la radiación infrarroja. Esto quiere decir que en invierno, refleja el calor interior hacia dentro, evitando que se escape; mientras que en verano, combinado con otros vidrios o laminares, ayuda a reducir la entrada de calor solar. 

Además, cuando se monta en unidades de doble o triple acristalamiento con cámaras llenas de argón o criptón, el vidrio bajo emisivo contribuye a obtener valores U significativamente más bajos, es decir, una menor pérdida de calor por m².

Tipos de recubrimientos: hard coat y soft coat

Existen dos tecnologías principales de recubrimiento. 

  • Hard coat (recubrimiento duro, spraying in hot glass). Se aplica al vidrio todavía caliente durante su fabricación. Es más resistente a abrasiones y facilita su manipulación, aunque ofrece prestaciones térmicas algo inferiores a los recubrimientos blandos.
  • Soft coat (recubrimiento blando, por deposición al vacío). Proporciona mejor rendimiento térmico (menor emisividad) y suele utilizarse en unidades de alto aislamiento. Requiere ser protegido dentro de una unidad de doble o triple acristalamiento para evitar daños.

La elección entre uno u otro dependerá de las exigencias de rendimiento, del tipo de carpintería y del presupuesto.

¿Qué mejora conseguirás en tu vivienda?

Incorporar vidrio bajo emisivo en ventanas y cerramientos reporta varios beneficios tangibles. Por ejemplo: 

  • Menor consumo energético. Al reducir la demanda de calefacción y, en algunos casos, de refrigeración.
  • Mayor confort. Se minimizan las paredes frías junto a las ventanas y la sensación de corrientes.
  • Control solar. Combinado con vidrios de control solar o con el correcto factor g, evita el sobrecalentamiento en orientaciones soleadas.
  • Mejor acústica (si se combina con laminado o cámaras más anchas). No es la propiedad principal, pero contribuye a un mejor aislamiento global.
  • Protección UV. Muchos vidrios low-E bloquean parte de la radiación ultravioleta, ayudando a preservar muebles y textiles.

¿En qué configuraciones es más eficiente?

El rendimiento óptimo se logra con combinaciones: vidrio bajo emisivo + cámara de argón + vidrio exterior (clásicamente 4/12/4 o variantes con bajo emisivo en la cara interna de la cámara). En proyectos exigentes se recurre a triple acristalamiento con low-E en una o dos capas y cámara de gas para obtener valores U muy competitivos.

Consejos para elegir el vidrio bajo emisivo adecuado

Piensa en la orientación de las ventanas y el clima: en zonas frías prioriza un bajo valor U; en climas cálidos busca un buen control solar (factor g) para evitar sobrecalentamiento. Revisa también la compatibilidad con marcos (aluminio con rotura de puente térmico, PVC o madera) y exige certificados y valores (U, g, TL%). Para soluciones específicas de protección solar y acabados puedes consultar nuestra sección de materiales y protección solar.

Instalación y mantenimiento

Un vidrio con gran rendimiento no alcanza su potencial sin una instalación correcta. Esto incluye sellado estanco, alineación adecuada de cámaras y coordinación con la carpintería. Confía siempre en profesionales para la instalación y colocación de vidrios y para el cálculo de transmitancia real del conjunto ventana-pared. El mantenimiento es sencillo: limpieza con productos no abrasivos y revisión periódica de juntas y burletes.

¿Merece la pena la inversión?

La respuesta suele ser siempre que sí. Ya que el incremento de coste frente a un vidrio estándar se amortiza con el ahorro en calefacción y el aumento del confort. Además, instalar vidrios de alta eficiencia mejora la calificación energética de la vivienda, lo que resulta en una revalorización del inmueble.

Conclusión

El vidrio bajo emisivo es una de las soluciones más efectivas para mejorar el aislamiento térmico de tu vivienda sin renunciar a la luz natural. Su capacidad para reducir pérdidas térmicas y controlar ganancias solares lo convierte en un aliado clave en la búsqueda de hogares más eficientes y confortables. Si quieres estudiar opciones concretas para tu proyecto, en Devitro Europa te asesoramos y fabricamos acristalamientos a medida. Visítanos en nuestra ubicación en Granada para un asesoramiento en persona o ponte en contacto con nosotros para más información.